Se podrá utilizar en más de 100 países y buscará alcanzar a la totalidad de los conductores argentinos. Además, convivirá con el modelo anterior hasta su fecha de vencimiento.Se podrá utilizar en más de 100 países y buscará alcanzar a la totalidad de los conductores argentinos. Además, convivirá con el modelo anterior hasta su fecha de vencimiento. Una nueva licencia nacional de conducir entrará en vigencia a partir de este año. Esta transformación, que es impulsada por el Ministerio de Transporte de la Nación junto a la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), buscará mejorar diversos aspectos.
Principalmente, se intentará alcanzar la superficie total del territorio argentino. Cabe recordar que hasta 2008, había más de 1.800 formatos de cédulas que pertenecían a los distintos municipios. Estos imponían sus propios costos, requisitos y categorías, por lo que el control se tornaba confuso y dificultoso. Con la llegada del nuevo carnet nacional, en 2010, se adhirieron cinco provincias, mientras que, en 2013, se incorporaron algunos distritos más.
Por estos días, según las estadísticas elaboradas por el Ministerio de Transporte, el 84% de los conductores argentinos posee este tipo de licencia única. Estas medidas no solo permitieron unificar los criterios de evaluación de aptitudes, conocimientos y capacitación, sino también igualar el formato de las mismas. Además, se logró fusionar la base de datos del Registro Nacional de Antecedentes de Tránsito.
Una vez que el sistema alcance el 100% de adhesión, se buscará implementar el Sistema Nacional de Puntaje, más conocido como ‘scoring’.
Otra de las principales innovaciones se enfoca en las normas internacionales. Es que el flamante documento podrá aprovecharse en más de 100 países, por lo que resulta esencial la traducción de los textos al inglés para el uso del mismo en el exterior.
En ese sentido, los sistemas de seguridad también serán modificados: a partir de estos cambios, el carnet contará con más de 40 medidas de protección inviolables que evitarán posibles falsificaciones, según fuentes del mercado.
En términos estéticos, la nueva licencia contará con cuatro cambios significativos. Por un lado, se ampliarán la tipografía, la fotografía y la fecha de vencimiento. Las causas de estas medidas buscarán aumentar la legibilidad, mejorar el reconocimiento de la persona y facilitar la labor del agente de tránsito. Por otra parte, también se incorporará tinta fluorescente de fácil detección.
Mayor exigencia
Otra de las transformaciones que tendrá el carnet repara en la rigurosidad de los exámenes viales, que consisten en diversos ejercicios: asistir a un curso de educación vial; aprobar un examen teórico de conocimientos sobre educación, ética ciudadana, señalamiento y legislación; superar distintas dificultades prácticas de idoneidad conductiva; y hacer lo propio en una prueba psicofísica que incluye una constancia de aptitud física, visual, auditiva y psíquica.
Estos, asimismo, se tornarán más estrictos, con el objetivo de reducir la tasa de siniestralidad en el país (ver recuadro). “En todo el territorio nacional, estamos haciendo autopistas y mejorando las rutas para que viajar sea más seguro, pero necesitamos también mejores conductores, que sean más responsables y estén mejor preparados”, aseguró recientemente Guillermo Dietrich, ministro de Transporte de la Nación. “Es en esta capacitación donde trabajamos por una movilidad segura, aumentando las exigencias en los exámenes, que son los mismos en todo el país. La licencia es nuestra principal herramienta de educación vial para formar, además de conductores, ciudadanos responsables y prudentes”, agrega Carlos Pérez, director Ejecutivo de la ANSV.
Otros datos
Fuentes del Ministerio de Transporte de la Nación aseguraron que “esta nueva licencia se obtuvo gracias a un proceso de licitación pública, abierta y transparente, que permitió que un documento que antes era de producción extranjera sea producido en nuestro país, a un menor costo operativo”.
Un detalle para nada menor: es importante aclarar también que todos aquellos automovilistas que cuenten con una licencia vigente no deberán renovarla, ya que la flamante credencial convivirá con el modelo anterior hasta su fecha de vencimiento.
Respecto a los plazos de otorgamiento, no se presentarán transformaciones: el período máximo será por cinco años. Por último, se optimizarán la descripción de clases y subclases que, en la actualidad, representan 27 categorías.
Números alarmantes
Según la Asociación Civil Luchemos por la Vida, en 2016 hubo 7.268 personas fallecidas en accidentes de tránsito. Solo la Provincia de Buenos Aires sumó 2.211 víctimas, en tanto que Santa Fe (736) y Córdoba (415) también aparecieron entre las jurisdicciones con mayor cantidad de siniestros fatales.